Contratamos a un minivan con a/c (ahhh!!!) y por 90 bolivianos por persona nos llevaría los 45 kms al norte para visitar esta ciudadela que en los años 50 brilló con todo su esplendor, vimos la mansión increíble del hombre mas rico de Bolivia, su teatro personal donde cantaron y actuaron los artistas mas famosos de la época y su planta eléctrica, vimos los inmensos motores, ya destruidos, el hotel, las hileras de casas que hacia para sus trabajadores. Todo en ruinas.
Luego llegamos al bello río Beni, cachuelas le dicen a formaciones de piedra negra que están dentro del río, hasta casi la mitad del río y hacen que la corriente pase por un como canal formando como un embudo y la corriente es fortísima, de hecho peligrosa, muchos han muerto aquí por intrépidos. Mientras nos asaban unos pescados sacados del río nos fuimos unos a explorar y otros a bañarse en el río, por supuesto en una parte segura del río.
Luego el regreso a Riberalta y de vuelta a Reyes.
Tchau, los queremos.
C y S
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